Sexo

¿Qué hacía allí sentado? Menos mal que nadie lo estaba viendo. Precisamente ese era el problema, aunque él mismo no se lo terminara de creer. En realidad había salido huyendo, fingiendo una excusa que a cada minuto que pasaba allí encerrado le parecía más estúpida. No había sabido reaccionar, le pilló tan de sorpresa que se sintió obligado a pedir tiempo muerto. Mientras ella, en la cama, aguardaba sin todavía saber que no se saldría con la suya, aunque comenzara a barruntarlo… por mucho que hubiera razonado a la hora de intentar convencerlo de que aquello era algo normal… ¡Una mierda! Ni siquiera para ella era algo normal… con todo lo que dijera… Intentaba repasar lo que acababa de suceder y no veía motivo que explicara aquella salida de su chica. Habían quedado, igual que siempre, tomado unas cervezas, pasado unas horas con los amigos y, como de costumbre, cuando y como tocaba, desaparecido en dirección a la cama. Como cualquier otro viernes… pero, además… ¿por qué tenía que ver porno sin él? En el fondo no le parecía bien, no sabía por qué pero las cosas no eran así. Él siempre se lo decía y ella sabía que no le mentía, todo lo que veía se lo contaba y si le parecía bien lo practicaban, pero de eso a qué ella viera porno sola o con las amigas y luego tratara de que hicieran lo que le había gustado… y más eso… era demasiado. Si creía que se iba a salir con la suya estaba lista. Él no pasaría por ahí, él no era maricón. Después silencio y los minutos que no paraban de correr. Ella seguía en la cama mirando al techo, aguardaba y en parte creía entender los temores de él mientras se decía que no tenía por qué, era ella la que se lo pedía y tampoco iba a ir contándolo por ahí, además de que podía gustarle. Era lo mismo que él hacía cuando probaban lo último que acababa de ver y que tan bien le había parecido, sobre todo por cómo disfrutaban los actores en la pantalla. Porque presumía de saber cuándo era de verdad y cuándo fingimiento, había situaciones y posiciones en las que notaba que las actrices realmente lo pasaban bien, disfrutaban de lo lindo, e inmediatamente después pensaba en su chica y en cómo hacerlo con ella para que también disfrutara; seguro que le gustaría, siempre estaba bien informarse y aprender del porno cosas que a uno no se le ocurrirían y que muchas veces acababa siendo estupendo practicar. Ella miraba el artilugio que tenía en la mano sin perder de vista la puerta del baño, tras la cual no se oía ni un respiro ¿qué estaría haciendo? Volvía a repasar lo sucedido y no encontraba motivo para su repentina indisposición, qué tenía que pensar ¿acaso no confiaba en ella? No le había gustado y había salido huyendo, lo que, bien visto, llegaba a enfadarla porque le parecía injusto por su parte. Ella siempre había accedido a sus peticiones. Que si he visto esto, que si he visto aquello, que si nos ponemos en esta posición, te la chupo de tal modo, lo hacemos de este otro, por delante, por detrás… y yo accedo a todo. Y ahora que le digo que también veo porno y que me pareció interesante lo que vi en la última película y cómo disfrutaban se va como si le hubiera ofendido, porque en el fondo se siente ofendido. ¡Qué gilipollez! Y así permanecían, él cada vez más irritado y menospreciado, casi humillado, y ella comiéndose sus intenciones y con la impresión de haberse comportado como una imbécil al creer que su novio era tan abierto como alardeaba. Y todo porque le había intentado explicar que en la película que había visto, durante el trío, una de las chicas se ponía un pene de silicona sujeto a unos arneses y penetraba al chico por detrás… Bien que gritaba de placer cuando una empujaba mientras él se lo comía a la otra. Y después de gastarme el dinero en uno de estos y decirle que si se lo hago yo a él me sale con que se lo tiene que pensar. ¿No es el mismo agujero en los dos casos? ¿Por qué si yo disfruto cuando me la mete por el culo porque lo ha visto en una película no puedo hacer lo mismo con él? Eso no quiere decir que sea marica, se trata de probar cosas nuevas entre los dos, ahora va a resultar que tiene prejuicios, y además es machista…

 

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